Descubre las singularidades que hacen de esta zapatilla, Kalenji Kiprun Junior, una zapatilla única en el mercado. En esta entrada te mostraremos por qué es el calzado perfecto para entrenos de atletismo para los más peques y la importancia de cuidar sus pies a largo plazo.
La suela: es la parte de la zapatilla que va en contacto al suelo. Lo que hace especial a esta zapatilla es la calidad del caucho para combatir la abrasión en el asfalto y aumentar el grip (agarre) para conseguir mayor seguridad en los apoyos y evitar resbalones típicos cuando adaptamos la biomecánica de la carrera. Otra ventaja a considerar es el “Non Marking” para su uso interior y exterior sin dejar marcas.
La entresuela: tiene un drop de 6mm (diferencia de altura entre talón y punta); esto va a ayudar que el niño vaya prácticamente “plano” asegurando una adaptabilidad y desarrollo de una pisada natural, similar a la que tendría descalzo.
Cuenta con un inserto de amortiguación K-Ring para absorber el impacto del talón contra el suelo (el impacto equivale casi al doble del peso del niño).
Otra ventaja es que el conjunto de Suela/entresuela es estriado: con esto conseguimos un mayor desarrollo en la fase de transición de la carrera cuando avanza el empuje del pie.
El Upper (la horma de toda la vida): Es todo lo que va encima de la entresuela. Es de los pocos modelos Junior que cuenta con termosellados de poliuretano como una zapatilla de adulto y que hace de este modelo una forma más adaptable y resistente. Las puntadas de la costura van sobre este material, por lo que augura más vida en la zona del Vamp (Puntera de la zapatilla) que normalmente es lo primero en deteriorarse en una zapatilla junior.
Los Overlays (costuras laterales que unen el talón y el empeine para sujetar el calzado) trabajan en 45 grados, cinco grados más que una zapatilla de adulto. Esto va a ayudar a adaptarse a una zancada más corta propia de un niño, obligando a realizar la transición completa del pie en el despegue del suelo.
El talón es más duro que un calzado normal, lo que va a ayudar a la sujeción.
En cuanto a los ojales, cuenta con menos ojales que una zapatilla de adulto (8+2), pensado en un entrelazado sencillo para el niño y al mismo tiempo suficiente para el trabajo de los Overlays.
La lengüeta es semiperforada para una mayor transpirabilidad. Cuenta con un pasador para cruzar el cordón y ayudar a que vaya siempre centrada.
El cuello se asemeja más al de una zapatilla de adulto, dejando más libertad de flexibilidad y rotación del tobillo en la carrera.
Si tenemos en cuenta todos estos factores, conseguimos una zapatilla ligera y muy técnica para ser un calzado Junior. Existe en dos colores: Amarillo fluorescente y Rosa fucsia fluorescente.