José Antonio Redolat fue ayer el hombre más feliz del atletismo español, El mediofondista valenciano se impuso en la prueba estelar y más cruel, la de 1500, la que iba a dejar fuera del Campeonato del Mundo de Canadá a uno de los cuatro aspirantes españoles. Redolat (3:39,05) impuso su velocidad en la recta final para adelantarse a Andrés Díaz, segundo, Reyes Estévez, tercero, y Juan Carlos Higuero, cuarto. Los medallistas demostraron que forman la terna más en forma del 1.500 nacional, pero ahora llega el momento de conocer la validez real de las plazas fijas que se adjudicaron a Díaz e Higuero en los Juegos Olímpicos de Sydney. El gallego la conservará seguro y sólo falta por conocer si el burgalés la mantendrá o la perderá en beneficio de Reyes Estévez. No defraudó ni un ápice la ´joya´ del Campeonato de España. Salió una carrera táctica en la que los tres primeros se desenvolvieron con mucho más oficio que un Juan Carlos Higuero que sufrió en su colocación. Todo lo contrario que Díaz, Estévez y Redolat, que por este orden afrontaron la última vuelta con los deberes hechos. Díaz encabezó la fila mientras pudo, pero Redolat exhibió un poderío abrumador. Reyes Estévez, que hasta hoy no sabrá si se queda fuera del Mundial o no, añadió un poco más de presión a los responsables de la selección. «Después de lo de Sydney sería un palo muy fuerte quedar excluido. Me haría mella y a lo mejor optaba por renunciar a la selección», aseguró tras la carrera.